La elección de la talla de nuestros patines es un tema de suma importancia, ya que puede marcar la diferencia entre disfrutar patinando o estar deseando quitártelos.
Bien, en este artículo vamos a tratar de despejar todas las dudas sobre tallas de patines. Lo primero de todo es tener claro que un patín no debe hacer daño, en muchas ocasiones hemos oído a algún vendedor decir, "no te preocupes, ahora hace daño pero cederá", si escucháis esto salir corriendo, ese vendedor lo único que quiere es que compres . El patín tiene que quedar ajustado a tu pie sin hacer daño, tenemos que notar que el dedo gordo del pie toca ligeramente la punta del patín. Si nos aprieta demasiado o nos queda suelto, esa no es nuestra talla, pide otra.
Una manera muy fiable de comprobar la talla es: te pones los patines ajustándolos bien (abrochando cordones, cierres y si es posible con un calcetín del mismo grosor que el que utilices normalmente para patinar), una vez ajustados, te pones de pie con las piernas rectas (sin flexionar las rodillas), en esta postura tienes que notar que el dedo gordo del pie toca la puntera del patín pero sin hacer daño. Ahora flexionas las rodillas y en esta postura debes notar que el dedo gordo del pie ya no toca, o roza muy suavemente la puntera del patín.
Tómate tu tiempo cuando te pruebes los patines, no tengas prisa, prueba varios modelos y tallas hasta estar convencido del que te gusta y te queda bien. Piensa que vas a pasar mucho tiempo con ellos puestos y tienes que estar convencido totalmente con ellos.
Espero que este breve tutorial te ayude a elegir correctamente la talla de tus patines.
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